Muchas veces, por diferentes factores, enfrentamos complicaciones al no realizar el pago de deudas, ya sea por liquidez o porque nos surgió algún asunto que no teníamos contemplado cuando adquirimos el compromiso.
Cuando estamos en una situación difícil como ésta, si no tenemos mucha información al respecto, podemos creer las ideas preconcebidas que hay en torno al tema. Esto, lejos de ayudarnos, puede generarnos más complicaciones.
Por lo anterior, traemos para ti un artículo sobre algunos mitos y realidades respecto al pago de deudas.
Es una idea que nos tranquiliza, sin embargo, es falsa. Las deudas no desaparecen por sí solas y, aunque hay algunas que no afectan tu historial, la mayoría lo hace, y para eso está el Buró de Crédito, que te otorga una calificación de acuerdo con tu desempeño crediticio.
De esta calificación dependerá si te dan tarjetas de crédito, préstamos, un auto, una casa, entre otras cosas. Por ello, es importante que tengas un buen historial y pagues tus deudas.
Asimismo, ten muy presente que tu mala calificación el Buró de Crédito no desaparecerá en el momento en que saldes tu deuda, sino que llevará algún tiempo, mismo que dependerá de la cantidad que debías.
Esta es una de las amenazas que más tienden a usar algunos despachos de cobranzas para intimidar a las personas y obligarlos a que realicen el pago de deudas. Sin embargo, esto es falso. No puedes ir a la cárcel por deber dinero a instituciones de crédito.
De acuerdo con el último párrafo del artículo 7 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, “nadie puede ser aprisionado por deudas de carácter puramente civil”.
Si, desgraciadamente, estás pasando por esta situación, busca ayuda legal y trata de llegar a un acuerdo con la entidad financiera para saldar tu deuda. No permitas que esto te robe la calma. Siempre hay soluciones.
¿Cuántas veces no nos han dicho que evitemos a toda costa los créditos? Seguramente, muchas. Sin embargo, no siempre es mala idea pedir un préstamo. La clave está en que conozcas tu capacidad de pago para que puedas saldar esta deuda.
Busca diferentes opciones dentro del mercado financiero, obtén toda la información importante y piensa seriamente qué empresa brinda más beneficios de acuerdo con el tipo de crédito que necesitas.
Este es uno de los más grandes mitos en torno al pago de deudas, pues es común pensar que, si tienes responsabilidades financieras extra, debes destinar gran parte de tus recursos a éstas y no podrás destinar una cantidad al ahorro.
Lo que debes hacer es dejar de adquirir deudas, hacer un presupuesto de tus ingresos y gastos mensuales, elegir la periodicidad del ahorro, pagar tus deudas poco a poco, priorizando aquellas que sean más grandes, y destinar parte del dinero que te sobra a un fondo de ahorro.
Esto es totalmente falso. Las referencias que piden las empresas cuando solicitas algún crédito o producto, en ningún momento estás obligado a realizar el pago de tus deudas.
Sólo pueden recurrir a ellas para preguntar por ti y localizarte, pero no pueden exigir más, pues los créditos son personales y ellas no quedan como avales. Esta práctica es sancionada por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF).
Si vives una situación relacionada con este punto, no pierdas tiempo e infórmate sobre lo que puedes hacer para evitarles molestias a tus referencias y no permitir que te sigan presionando por esa vía.
¡Jamás! Este es uno de los mitos más fuertes. Recuerda que el truco de la ganancia radica en los intereses. Por lo que, entre menos pagues, más tardarás en liquidar la deuda, y entre más tardes, más intereses se generarán, por lo que terminarás pagando más, aunque “no lo sientas”.
Opta por dar bonos a capital, esto hará que se reduzca el plazo de la deuda, al mismo tiempo que disminuyen los intereses. Permitiendo que tus finanzas tengan un respiro.
Sabemos que, a primera vista, puede parecer complicado; sin embargo, con organización, todo es posible. No dejes que la preocupación por el pago de deudas te ciegue y busca opciones que te beneficien a largo plazo.
Si te encuentras en una situación financiera complicada, tienes muchas deudas y quieres salir de ellas sin verte tan perjudicado, en Credifiel tenemos una opción para ti: saneamiento financiero.
El saneamiento financiero es un préstamo que sirve para pagar las deudas que tienes con otras instituciones. Es decir, te ayuda a consolidar varias deudas en una misma, lo que también implica que únicamente hagas un pago.
Dicho pago se adapta a tus necesidades y a tu situación. Generalmente, el plazo aumenta, pero los pagos disminuyen, permitiendo que tu economía mejore y, después del tiempo estipulado, puedas tener unas finanzas sanas.
Sólo debes cubrir algunos requisitos mínimos como:
Si cumples con estos requisitos o tienes alguna duda respecto a alguno, no dudes en acudir con nosotros. Con gusto, te ayudaremos a resolver cualquier inquietud que tengas y a realizar el trámite correspondiente para iniciar tu saneamiento financiero.