Como médico jubilado o activo del IMSS o del ISSSTE, es probable que hayas considerado la posibilidad de abrir tu propio consultorio, continuar con tu pasión por la medicina, seguir ayudando a quien lo necesita y, además, tener un ingreso extra. Si esta idea de emprender ya se ha vuelto una constante en tu carrera, te decimos por dónde empezar y lo que necesitas para lograrlo.
De acuerdo con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), la cual se encarga de vigilar que los establecimientos de atención médica como clínicas y consultorios ofrezcan atención de calidad y estén regulados, hay cinco requisitos que debes cumplir para montar tu propio consultorio. Toma nota.
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Tanto el dueño del consultorio como el personal que colabore con él, deben contar con título y cédula profesional y, estos deben estar a la vista dentro de la oficina. El consultorio también deberá tener un Aviso de Funcionamiento y un Aviso de Responsable Sanitario, los cuales se tramitan directamente con COFEPRIS.
El espacio externo de tu consultorio debe contar con accesos para pacientes con capacidades diferentes, una recepción y una sala de espera de mínimo seis lugares. En cuanto al espacio interno, debe haber un área de consulta y otra de exploración física delimitada por un elemento, como un biombo. Además, debe contar con un lavabo, jabón, toallas desechables y servicios sanitarios para los pacientes.
El consultorio debe contar con una hoja diaria en la que se registren todos los pacientes y con un recetario médico impreso que cumpla con las normas vigentes, es decir, que contenga el nombre del médico, la institución que expidió su título y cédula, el número de cédula profesional, domicilio del consultorio y fecha de expedición.
El área interna del consultorio debe contar con un bote de desechos con bolsas de basura municipal y otro con bolsas rojas para residuos biológicos e infecciosos. Ambos botes, nunca deben estar llenos más allá del 80% de su capacidad. Además, tanto el consultorio como el material médico siempre deben estar limpios, desinfectados y en buen estado.
El consultorio debe contar con salidas de emergencia perfectamente bien señalizadas, con un botiquín de emergencias y con un extintor. Todos estos elementos son revisados por COFEPRIS antes de otorgar los permisos correspondientes para que el consultorio comience sus operaciones.
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Lo primero que debes hacer es investigar tu mercado, decidir cuál será la ubicación que tendrá tu consultorio y así definir un capital para emprender. Contar con una ubicación cómoda en la que tus pacientes se sientan a gusto es fundamental para iniciar, aunque es probable que esto eleve el monto que necesitarás para abrir tu propio consultorio. Lo importante es que tengas un lugar en el que tanto tú como tus pacientes se sientan a gusto y con la confianza de que están en las mejores manos.
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Una vez que hayas definido el capital aproximado que necesitarás, es probable que tengas que solicitar un préstamo a una institución bancaria o a una financiera para poder lograr tu emprendimiento. En Credifiel contamos con préstamos vía nómina para pensionados y jubilados del IMSS y del sector de salud pública de hasta $350,000 pesos y con préstamos por domiciliado de hasta $70,000 pesos, con plazos de pago diferenciales. Tenemos convenios con el IMSS, ISSSTE y con la Secretaría de Salud, conoce más detalles y define qué tipo de préstamo se adapta mejor a tus necesidades aquí.